Pisto sencillo

INGREDIENTES

• 1 kilo de calabacines
• 1 lata de tomate triturado de vuestra marca favorita o tomate natural rallado o triturado por vosotros mismos
• Sal
• Azúcar
• Aceite de oliva

Se cortan los calabacines, previamente pelados, a rodajas no muy gruesas. Si el calabacín es enorme, (en este caso era así) podeis cortalo longitudinalmente primero para hacer, por decirlo de alguna forma, medias lunas.
En una sartén se echa un poco de aceite y, cuando esté caliente, poneis el calabacín.
Se sofríe a fuego medio-suave, dándole algunas vueltas, le echais un poquito de sal y se tapa. Lo dejais a fuego mínimo unos minutos, removiendo un par de veces, y le añadís la lata de tomate. Lo aderezais al gusto, con sal y el azúcar necesario para contrarrestar la acidez del tomate y lo tapais, dejándolo a fuego mínimo.
Removed de vez en cuando para evitar que el tomate se pegue, sobre todo hacia el final, cuando ya está espesito y casi hecho.

NOTA.- Este plato puede hacerse en cantidad y congelar después en las porciones que más os convenga :)

¡¡¡BUEN PROVECHO!!!